Extrañas el ruido de una casa llena? ¿Se han ido tus hijos a la universidad, se han casado o se han mudado lejos? Entiendo cuán difícil puede ser la etapa del nido vacío para nosotras como madres. Viene demasiado rápido.
Ana, una mujer de la Biblia, ansiaba tanto un hijo que en 1Samuel 1:11 prometió a Dios: “yo te lo entregaré para toda su vida”. Y cumplir su promesa significó que su hijo se mudara a otra ciudad. Tenía que
amarlo a kilómetros de distancia. La madre de la escritora Elisabeth Elliot oró y escribió cartas. Durante 45 años escribió dos veces por semana a cada uno de sus seis hijos. ¡Y eso fue antes que existieran las computadoras y el correo electrónico!
Cuida de tus hijos y de tus nietos, en oración y amor. Esta inversión es importante para el Señor y para tu familia.
Dios, ¿les digo a mis hijos que los amo? Eso quiero. Eso procuro. Trato de demostrarlo mediante mi cuidado y afecto.
Ayúdame a aprovechar cada oportunidad para decir, escribir, y comunicar mi amor por ellos… y por ti.


Gracias por sus comentarios y recuerda comentar con tu nombre ❤️