Rasgad vuestro coraz贸n, y no vuestros vestidos, y convert铆os a Jehov谩 vuestro Dios; porque misericordioso es y clemente, tardo para la ira y grande en misericordia, y que se duele del castigo.
Joel 2:13
La paciencia de Dios es uno de los grandes temas de la Escritura. Dios
se la revel贸 a Mois茅s y luego se la demostr贸 constantemente a su pueblo.
Nehem铆as la record贸 al confesar el pecado de la naci贸n (Nehem铆as 9:17).
David la busc贸 para s铆 cuando procuraba refugiarse de sus enemigos
(Salmo 86:15), y cuando pidi贸 perd贸n por sus errores (Salmo 103:8). Los
profetas Joel, Jon谩s y Nah煤m la experimentaron en forma directa. Es
probable que el ap贸stol Pablo haya tenido este atributo en mente cuando
comenz贸 su descripci贸n del amor al expresar: «El amor es paciente, es
bondadoso» (1 Corintios 13:4).
La clase de paciencia de Dios, la paciencia que nos llama a
personificar no es algo ocasional. Es una respuesta progresiva y
repetitiva que ofrecemos una y otra vez. Quiz谩 alguna vez la paciencia
deba actuar con juicio (N煤meros 14:22-23), pero despu茅s sucede mucho
m谩s de lo que la mayor铆a de nosotros suele esperar. Ser como Dios es ser
paciente.
EL DESAF脥O DE ESTA SEMANA
Piensa en un 谩rea donde luches para demostrarle paciencia a tu c贸nyuge. Manifi茅stale amor al darle m谩s tiempo para crecer en ese aspecto. Ora espec铆ficamente por esta cuesti贸n.
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