Sáname, oh Jehová, y seré sano; sálvame, y seré salvo; porque tú eres mi alabanza.
Jeremías 17:14
Dios te bendiga mi querida hermana, ¿Cómo estás?
Espero que estés bien y avanzando en éste desafío, me gustaría mucho saber si haz dejado que la Palabra de Dios permanezca en tu mente.
Hoy quiero que medites en esta Palabra, el Señor quiere que entiendas que sólo puedes ser sana si recibes esa sanidad que ya Dios hizo, y si quieres realmente la ayuda del Señor, la sanidad del Señor.
En todos estos días no hemos pedido nada solo hemos aceptado lo que dice la Palabra de Dios y hemos callado la voz de Satanás cuando llega a nuestra mente.
Hoy quiero que le digas al Señor con todo tu corazón lo que anhelas ser sanada porque es a Dios que quieres alabar.
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