Maridos, amad a vuestras mujeres y no se谩is 谩speros con ellas.
Colosenses 3:19
La amargura lleva a un enojo constante. El veneno de la amargura puede surgir en cualquier circunstancia. Puede arraigarse en una persona a temprana edad, o con el tiempo puede crecer como maleza, luego de una p茅rdida o situaci贸n en particular. No obstante, la amargura siempre reviste mucho m谩s que las pocas desilusiones que la provocaron. Cuando el enojo sin resolver comienza a infectar el coraz贸n, el resultado es un modelo constante de dureza y falta de perd贸n.
Efesios 4:31 agrupa la amargura junto con «enojo, ira, gritos, maledicencia»; una mezcla sumamente 谩cida de sentimientos desagradables que se disparan f谩cilmente. Sin embargo, el amor, al evitar que la amargura se arraigue, tambi茅n puede mantener alejados a los dem谩s componentes.
Perm铆tele a tu c贸nyuge que se帽ale el primer indicio de dureza o rencor en tu conducta y en tus actitudes. Esto evitar谩 que el enojo infecte la
relaci贸n.
EL DESAF脥O DE ESTA SEMANA
P铆dele al Se帽or que revele cualquier 谩rea de envidia o resentimiento en tu coraz贸n hacia tu c贸nyuge. Admite tu situaci贸n ante Dios y pide perd贸n, luego atr茅vete a pedirle perd贸n a tu c贸nyuge tambi茅n
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