Me preparo cada día para vivir en mi propósito

Porque somos hechura de Dios, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios dispuso de antemano a fin de que las pongamos en práctica. Efesios 2:10

Dios siempre quiere que sus hijos vivan haciendo el bien, por eso cuando te da una nueva naturaleza o nueva creación, Él también te da la capacidad de hacer lo correcto y la capacidad de hacer el bien.
Tu vieja naturaleza estaba entrenada para vivir egoístamente, enfocada solamente en ti y tus propios intereses.
Tu nueva naturaleza tiene la capacidad de vivir para Dios y para los demás, pero es
necesario que desarrolles esa capacidad, escogiendo cada día vivir haciendo lo que Dios le agrada y lo que beneficia a los demás. Es importante que te unas a Dios en lo que Él quiere hacer en esta tierra, en tu comunidad y en tu familia, ya que Dios planeó hacer el bien a través de ti.
Para eso es necesario que cambies el enfoque de tu vida, no puedes ser tú el centro, sino Dios; no puedes seguir viviendo solo para ti, sino enfocado en los demás. Así vivió Jesús su vida en esta tierra, buscando siempre la voluntad de su Padre en los cielos, con la ayuda del Espíritu Santo. La misma fórmula es la que tú tienes que aplicar en tu vida, buscar hacer la voluntad de Dios con la ayuda del Espíritu Santo, ya que en tus propias
fuerzas, jamás podrías lograrlo. Por eso es necesaria tu transformación integral, para que puedas estar listo para los desafíos que una vida de entregada a los demás requiere, pero recuerda si lo logras estarás viviendo en el propósito de tu vida.

REFLEXION DEL DIA
Lea: Hechos 10:37-38, Lee 2 Corintios 5:17-20
¿Cuál crees que es la mejor buena obra que puedes hacer en la tierra?
¿Cuán importante crees que es la ayuda del Espíritu Santo en nuestra vida enfocado en hacer el bien?

Medita y escribe cual es el centro de tu vida y como puedes vivir una vida enfocada en los
demás.