Su andar

*Día 20*

*SU ANDAR*

*De igual forma enseña a los jóvenes a tener buen juicio; sírveles de ejemplo haciendo siempre lo correcto. Cuando enseñes, hazlo con honestidad, de una manera que merezca respeto y con un mensaje sano e irreprochable para que nadie pueda criticarte. Así cualquiera que esté en contra se sentirá avergonzado porque no tendrá nada malo que decir...* Tito 2:6-8.

Existen oficios donde literalmente te ofrecen clases de postura. Allí el instructor insistirá en que se camine adecuadamente con la espalda recta y los hombros alineados.

Aunque nos veamos mejor caminando de esa manera, no creo que al Señor le interese si nuestros (as) hijos (as) tienen la capacidad de mantener en equilibrio libros sobre la cabeza. Sin embargo, a Él sí le interesa mucho su andar diario.

El alcohol, las drogas, pornografía, juegos de azar y otras adicciones son algunas de las trampas para minar el andar de nuestros (as) hijos (as). De hecho, el ataque contra ellos es tan fuerte que ellos (as) no lo pueden resistir sin nuestro apoyo.

La buena noticia es que a través de la oración y el consejo sabio y amoroso podemos guiarlos en su andar.

*ORACIÓN:*

*Y sigan el camino del amor así como Cristo nos amó…* Efesios 5:2.

Oh Señor, te pido que mi hijo (a) ande sabiamente y en amor. Que su comportamiento sea de un hombre y/o una mujer íntegro (a), disciplinado (a) y con dominio propio a través de los cuales refleje a Jesús.

Señor, mantén a mi hijo (a) libre de cualquier adicción.

Hazle fuerte en ti, acércale a ti y ayúdale a entregarte el control de su andar.

Háblale a su corazón, muéstrale el camino que debe transitar. Padre Celestial, frustra cualquier plan que venga para destruir su vida.

Tu Palabra dice: *"Hay camino que parece derecho al hombre, pero su fin es camino de muerte"* Proverbios 16:25.

Dale el discernimiento y la fuerza para poder decir NO a lo que trae muerte y SÍ a las cosas de Dios que traen bien a su vida.

Guía cada uno de sus pasos; quita toda rebeldía, todo deseo de hacer las cosas a su manera, de llevar la contraria.

Pon en mi hijo (a) mansedumbre, dominio propio y que te honre a ti, primeramente, y luego a sus padres. *En el nombre de Jesús, amén.*